pentecostes 2015

PENTECOSTES

1. OBJETIVO. Los  niños, niñas y adolescentes descubren que el Espíritu Santo  les da dones  y  frutos que se hacen vida  en lo cotidiano de cada  cristiano    

                                            

2. PREPARACION DEL LUGAR.

Ambiente  acogedor y significativo. Se decora el lugar con una piñata en forma de paloma, dentro se colocan los frutos del Espíritu Santo, en forma de llamas: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios. La descripción de cada don se escribe en la parte de atrás.

En forma de   palomas   se escriben  los frutos: Alegría, amor, ánimo, afabilidad, amabilidad, benignidad, bondad, caridad, castidad, comprensión, constancia,  continencia, dominio de sí, fe,  fidelidad, generosidad,  gentileza,  gozo espiritual, humildad,  longanimidad, mansedumbre, moderación, modestia, paciencia, paz

3. AMBIENTACION. Bienvenida y Cantos alegres alusivos a la pascua o al Espíritu Santo

4. EXPLICACIÓN

Pentecostés antigua fiesta judía en que ofrecían a Dios las primicias del campo y se conmemoraba la Alianza del Sinaí.   Jesús murió y resucitó, ascendió al cielo y   envío el Espíritu Santo sobre los apóstoles, como  lo había prometido, justamente el día en que se celebraba esa fiesta.  Eso es lo que nosotros, cristianos, celebramos el Día de Pentecostés, cincuenta días después de la Pascua de Resurrección. Celebramos  y revivimos el don del Espíritu Santo para la comunidad. Con la fuerza del Espíritu podemos caminar, vivir como Jesús y trabajar para que nuestro mundo sea más justo, más fraterno, más pacífico, más “Reino de Dios”.

5. ACTIVIDAD

Se invita a  uno de los niños para que  haga la siguiente lectura:  Lc 28, 16-20

Luego el asesor por medio del siguiente comentario puede explicarle lo que la Palabra de Dios que acabamos de escuchar nos puede enseñar:

·  Después de su resurrección Jesús continúa enseñando a sus discípulos. Los prepara para que continúen su misión cuando Él vuelva junto a su Padre.

·  Les da el Espíritu Santo, la fuerza de Dios que guía para vivir según las enseñanzas de Jesús y cumplir su misión sin descansar, con la certeza de su presencia, todos los días.

·  El Espíritu de Jesús se manifiesta en nosotros por medio de los dones, y los frutos.  Gracias a ellos podemos actuar como buenos cristianos, construir comunidad en nuestras familias, en los sectores,  en el colegio, y  con los amigos en la catequesis. Gracias a ellos, las cosas más difíciles se nos pueden volver fáciles y sencillas... ¡Es que son un don (regalo) de Dios!

·  El Espíritu Santo que Jesús nos da se manifiesta por medio de 7 dones los cuales son: sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios. ( en este orden para facilitar el aprendizaje)

Organizados en grupos, según el número de participantes.

Descubrir en esta sopa de letras los siete dones del Espíritu Santo:

Sabiduría, inteligencia, consejo, fortaleza, ciencia, piedad y temor de Dios.  

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6. LECTURA DE LA PALABRA

 El  cirio pascual se coloca encendido al centro y los participantes alrededor.

*Se invita  hacer silencio: Hacemos silencio en nuestro interior y acallamos los ruidos para escuchar la voz del Señor en  su Palabra. (Momento de silencio con música de fondo).

*Canto: Dios está aquí

*Lectura.   Hech. 2, 1-11

 -  Lector: “Al llegar el día de Pentecostés, estaban todos reunidos en el mismo lugar. De repente, un ruido del cielo, como de un viento recio, resonó en  toda la casa donde se encontraban. Vieron aparecer unas lenguas, como llamaradas, que se repartían, posándose encima de cada uno. Se llenaron todos de Espíritu Santo y empezaron a hablar en lenguas extranjeras, cada uno en la lengua que el Espíritu le sugería”.

Canto: ESPÍRITU SANTO, VEN, VEN  (3) EN EL NOMBRE DE JESÚS.

 Canto: Acompáñame, condúceme, toma mi vida.

Santifícame, transfórmame. Espíritu Santo, ven, ven. 

-  Lector:  “Se encontraban entonces en Jerusalén judíos devotos de todas las naciones de la tierra. Al oír el ruido, acudieron en masa y quedaron desconcertados, porque cada uno los oía hablar en su propio idioma.

Canto: ESPÍRITU SANTO, VEN, VEN  (3) EN EL NOMBRE DE JESÚS.

Resucítame, conviérteme, todos los días.

 Glorifícame, renuévame. Espíritu Santo, ven, ven.

   - Lector: Enormemente sorprendidos, preguntaban: ¿ No son galileos todos esos que están hablando?. Entonces, ¿cómo es que cada uno los oímos hablar en nuestra lengua nativa?.

Canto: ESPÍRITU SANTO, VEN, VEN  (3) EN EL NOMBRE DE JESÚS.

 Ilumíname, inspírame, cuando decaiga.

Aniquílame, consúmeme. Espíritu Santo, ven, ven.

-          Lector: Entre nosotros hay partos, medos y elamitas, otros vivimos en Mesopotamía, Judea, Capadocia, en el Ponto y en Asia, en Frigia o en Panfília, en Egipto o en la zona de Libia que limita con Cirene; algunos somos forasteros de Roma, otros judíos o prosélitos; también hay cretenses y árabes; y cada uno los oímos hablar de las maravillas de Dios en nuestra propia lengua”.     

-                                                                                           

-          Canto: Jesús está pasando por aquí

ORACION: mientras se canta en procesión los niños, niñas y adolescentes elegidos  van  presentando el símbolo y se va nombrando y dejando a los pies del cirio Pascual

1.  Pedimos: Por la paz entre los pueblos.

           Símbolo: Una paloma

2.             Pedimos: Para que haya Pan repartido para todos.

Símbolo: Unas espigas

3.  Pedimos: Para  que  haya  sed del Dios vivo en el corazón del mundo.

Símbolo: cántaro de barro.

4. Pedimos: Para que haya  fraternidad y la comunión en las familias, en los grupos, comunidades  y en nuestra Iglesia parroquial y  diocesana.

Símbolo: una lámpara encendida.

5. Pedimos: Pedimos para que los misioneros aumenten en nuestra parroquia

            Símbolo: amarillo y  blanco

6. Pedimos: Para que las comunidades sinodales se fortalezcan en la vivencia del amor, la fe y la esperanza

            Símbolo: el signo del sínodo diocesano.

Tomados de las manos se ora el Padre Nuestro y la oración del niño misionero

7. PIÑATA.  Con la alegría normal de las piñatas: dulces, palomas, llamas, y otros
8. MEDITACIÓN. El lugar  preparado para este momento está adornado con unas palomas  con las letras A, B, C, D, F, G, H, L, M,  P. Se invita a los participantes para que cada quien lea el contenido, la explicación de cada fruto que ha recogido de la piñata y lo coloque en las palomas o sobres según las letras: por ejemplo Amor donde esté la A

Canto: himno de la infancia misionera

9. ENTRE AMIGOS. Los participantes se organizan en dos o tres grupos para que participen en la sopa de letras expuesta en un lugar visible y en el tiempo determinado, con los frutos del Espíritu Santo: Alegría, amor, ánimo, afabilidad, amabilidad, benignidad, bondad, caridad, castidad, comprensión, constancia,  continencia, dominio de sí, fe,  fidelidad, generosidad,  gentileza,  gozo espiritual, humildad,  longanimidad, mansedumbre, moderación, modestia, paciencia, paz

10. COMPROMISO

Para que estos mismos dones puedan dar su fruto en cada uno de nosotros les invitamos a que cada uno se haga su propio germinador en el que pondrá 2 o 3 semillas y durante toda esta semana hasta el próximo encuentro tiene el compromiso de cuidarla, darle agua, que tome un poco de aire, en fin todos esos cuidados que cada uno puede dar para que la semilla crezca, se ponga fuerte, y comience a dar su fruto, luego haga su reflexión y  se muestre a los compañeros misioneros.

El Espíritu nos capacita para la MISIÓN, no podemos esperar a ser santos para dar testimonio de nuestra fe. Nuestras limitaciones nos deben ayudar a realizar nuestro servicio al Evangelio. Todos somos discípulos – misioneros de Jesucristo. Con Jesús y María misioneros toda la vida

11. DESPEDIDA. Queda a libertad de los asesores

EXPLICACION DE LOS DONES

Consejo: Se trata de tener la capacidad de escuchar al Señor que  habla y tratar de discernir lo que El quiere y espera de ti. El Don de consejo te ayuda a enfrentar mejor los momentos duros y difíciles de tu vida, al mismo tiempo te da la capacidad de aconsejar, inspirados por el Espíritu Santo, a quienes te piden ayuda, a quienes necesitan palabras de aliento y de vida.                                                             

                                                                                                             

Ciencia: ayuda a descubrir la presencia de Dios en este mundo, en la vida, en la naturaleza, en el día, la noche, en el mar, la montaña;  permite discernir entre el bien y el mal y  hace mirar a las personas y a las cosas con los ojos de Dios                               

Entendimiento: conocer y comprender las cosas de Dios, la manera cómo actúa Jesucristo, descubrir inteligentemente sobre todo en las páginas del Evangelio, que su manera de ser y actuar es diferente al modo de ser de la sociedad actual. El Don del entendimiento es una luz especial que puede llegar a todas las personas y muchas veces tiene frutos en los niños, en la gente más sencilla.

                                              

Sabiduría: Este es el Don del buen gusto que  hace saborear y gustar las cosas de Dios. La Sabiduría es para ver  sabiamente las cosas, no sólo con la inteligencia sino  también con el corazón, tratando de ver las cosas como Dios las ve y comunicándolas con sabiduría de tal manera que los demás perciban que Dios actúa en ti, en lo que piensas, dices, y haces.

               

Fortaleza: Este Don te da la capacidad de superar los momentos duros y difíciles de la vida. Muchas veces eres débil ¿verdad?, puedes caer fácilmente en las tentaciones propias de esta sociedad como lo es el dinero, el poder, el consumismo, los vicios... Es allí donde necesitas el Don de la Fortaleza y pedir al Señor que te ilumine.

Piedad: Este Don  permite acercarse confiadamente a Dios, hablarle con sencillez, abrir el corazón de Hijo a un Padre Bueno del cual se  tiene  la certeza que te quiere y te perdona: “Padre Nuestro...” Este Don te ha de motivar a la oración y al encuentro profundo con el Señor,

               

Temor de Dios: Aquí no se trata de tenerle miedo a Dios, sino más bien de sentirte amado por El. Cuando se descubre el amor de Dios lo único que deseamos es hacer su voluntad y sentimos temor de ir por otros caminos. En este sentido existe temor de fallar y causarle pena al Señor. Con este Don tienes la fuerza para vencer los miedos y aferrarte al gran amor que Dios te tiene.

EXPLICACION DE LOS FRUTOS

 Caridad o amor: derramado por el Espíritu en el creyente, pero manifestado como amor al prójimo. Ve en todo hombre su hermano, más aún, llega a ver a Cristo en su prójimo; se entrega a su servicio hasta la donación de su propia vida: vive, en una palabra, todas las caracte­rísticas del amor (1 Corintios 13) pero en relación con el prójimo.

 Alegría o gozo: Es el gusto, de­leite espiritual, que nace de la conciencia que se tiene de la amistad con Dios. Cuando este fruto se manifiesta, la persona es alegre y optimista".

"Parece como si irradiara un res­plandor interior que le hace ser notado en cualquier reunión. Cuando él está presente, parece como si el sol brillara un poco más de luz.

 Paz: se basa en la conciencia que se tiene de la amistad de Dios. Encierra la idea de perfección y plenitud. Es la persona serena, tranquila. Se dice de ella que tiene una "personalidad equili­brada". En medio de las preocupacio­nes conserva la calma profunda. Es un tipo ecuánime, en quien se confía fá­cilmente y a quien se acude en las cosas de emergencia difíciles y de conflicto. La paz no es otra cosa que la tranquilidad del orden y ese orden empieza poniendo a Dios siempre en primer lugar.

Paciencia: la persona acepta hasta el heroísmo los sufrimientos y males. No son para ella una carga Insoportable, sino los usa como instrumentos para la construcción del Reino de Dios.

Si manifiesta sus males, es para buscar­ soluciones o para animar a otros. No llega a la ira fácilmente, no guarda rencor por las ofensas ni se perturba o descorazona cuando las cosas le van mal o la gente no le corresponde como debiera. Ante el fracaso, sabe levantarse y continuar adelante sin maldecir ni echarle la culpa a la suerte o al destino. La paciencia está relacionada con el Don de fortaleza.

Benignidad, Amabilidad, afabilidad, gentileza, be­nevolencia, comprensión de los demás, Así, la persona en la que se produce este fruto del Espíritu es benigna, amable, afable, gentil y comprensiva. La gente acude a ella con facilidad. Por estas condiciones, atrae sin dificultad alguna a los más débiles y necesitados, los niños, los ancianos, los afligidos, los atribulados que se confían fácilmente a él. La dulzura lo caracteriza igualmente.

 Bondad: Posee este fruto aquel de quien se dice: i Qué bueno es! Qué bondad la suya! Es profundamente bueno! Es aquel que sabe ver lo bueno que hay en cada ser humano. Sin ser in­genuo, se fija más en lo positivo de las personas y de la vida que en lo negati­vo. Al actuar así, como en los demás frutos, siente la consolación del Espí­ritu.

Defiende la verdad, la justicia y el derecho.

 Longanimidad: El acto virtuoso, acompañado de consolación del Espí­ritu, a ella se juntan la magnificencia y la paciencia.  Por  la longanimidad se tiene fuerza para esperar y soportar el dolor, el infortunio y el fracaso, hasta llegar a la meta propuesta. La longanimidad es una virtud que consiste en saber aguardar. Saber aguardar a Dios, al prójimo y a nosotros mismos,  evitar la im­paciencia que podría causarnos la de­mora o tardanza de este bien, también se llama: Larga esperanza.

 Mansedumbre: Este fruto, con­siste en una moderación y dominio de la ira que no hace daño, sino que, al revés, va acompañado de la consola­ción del Espíritu.  El manso dialoga y discute, defen­diendo sus puntos de vista con per­suasión,  sin llegar a la disputa y al acaloramiento. Mansedumbre no significa debilidad ni blandura. El manso sabe ser enérgico y fuerte cuando es necesario, pero sin dejarse dominar de la ira.

La mansedumbre y la humildad van muy unidas. Por eso, se dice que es la actitud de los humildes que como Jesús, se dejan guiar por el Espíritu del Padre.

 Fe: el ser humano cree, aceptando la Buena Nueva, y entregándose a Cristo. Por esta fe, proclamamos las verdades contenidas en el Credo. Es   aquella con­fianza en Dios que es capaz de llegar a hacer milagros y hasta mover montañas.  La fe que equivale a fidelidad, en la relación con Dios, y  con los hermanos.

La fe-fidelidad encierra una triple fidelidad: Fidelidad a Dios, a la iglesia y al hombre-ser humano

 Modestia: nos lleva a guardar el debido decoro en los gestos y movimientos corporales, el debido or­den en el arreglo del cuer­po y del vestido. La persona modesta, tiene en su comporta­miento, en su vestido y en su hablar, una decencia que le hacen fortalecer la vida cristiana de los de­más.

Dominio de sí El dominio propio es la capacidad que nos permite controlar a nosotros mismos, nuestras emociones El domino propio significa que nos alejamos del pecado y hacemos solamente lo que es correcto. La persona disciplinada conoce y entiende la ley de Dios y no hace nada que esté fuera de su límites.

PALOMAS PARA LA PIÑATA

frutos del Espíritu Santo: Alegría, amor, ánimo, afabilidad, amabilidad, benignidad, bondad, caridad, castidad, comprensión, constancia,  continencia, dominio de sí, fe,  fidelidad, generosidad,  gentileza,  gozo espiritual, humildad,  longanimidad, mansedumbre, moderación, modestia, paciencia, paz

(Las letras sobrantes se llenan después de haber colocado los frutos)

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LLAMAS PARA LOS  DONES

PALOMA PARA LOS FRUTOS